Franquicias de floristerÃas: negocios que florecen
Seguro que en más de una ocasión has regalado flores. Ramos para el dÃa de la madre, para un cumpleaños, un aniversario de boda, para declararle a tu pareja tu amor, decorar una ceremonia o el salón de una casa. También flores para un funeral o para honrar a los seres queridos que ya se han ido. Lo cierto es que las flores son un regalo muy recurrente. Llenan los espacios vacÃos de color, decoran los ambientes y emiten un excelente aroma. Asimismo, son un obsequio atemporal, puesto que son bienvenidas en cualquier mes del año. Estos son algunos de los motivos por los que las franquicias de floristerÃas son negocios que florecen.
Si a ello le sumamos el hecho de que la producción de planta ornamental en España ha experimentado una tendencia al alza, aumentando en un 37% en la última década, podemos decir que las franquicias de floristerÃas son, cada vez más, un negocio rentable y seguro. Además, el valor de la producción se encuentra en torno a los 2.000 millones de euros, con tendencia al alza.
Las franquicias de floristerÃas se encuadran dentro del sector de tiendas especializadas y los datos demuestran la importante evolución que han experimentado este tipo de negocios. La Asociación Española de Franquiciadores (AEF) ha presentado este año el último informe estadÃstico con muy buenos resultados para el sector. Según este estudio, publicado bajo el tÃtulo âLa franquicia en España 2017â, las franquicias de tiendas especializadas facturaron cerca de 510 millones de euros en 2016.
Por otra parte, el informe recoge el total de establecimientos existentes, 2.874 (1.830 franquiciados y 1.044 propios) y 83 enseñas, dando trabajo a más de 7.600 empleados.
Pasos para montar una franquicia de floristerÃa
Si has pensado en montar una franquicia de floristerÃa tendrás que elegir el local. Por lo general, las floristerÃas permiten diferentes espacios para empezar a comercializarlas, lo que te permite una mayor flexibilidad. Es importante que el local tenga una buena ubicación y goce de luz, tanto de iluminación natural como artificial. Según donde ubiques tu franquicia llegarán más o menos clientes, mejorando la visualización de tus flores si las expones tras una gran cristalera expositora y otorgándoles una más larga y mejora vida y armonÃa a tus ramos.
Independientemente de en dónde esté tu tienda, tendrás que poder almacenar tu inventario de flores a una temperatura fija. Si la temperatura es muy alta o muy baja, las flores pueden marchitarse o secarse y no podrás venderlas. La temperatura óptima para almacenar la mayorÃa de las flores es de 1 a 2°C. Las flores se mantienen mejor en alta humedad, mientras que la humedad relativa no debe ser menor a 80%. Recuerda que las flores tropicales deben almacenarse a entre 12 y 15°C, puesto que las temperaturas más frÃas pueden dañarlas.
Si estás interesado en abrir una franquicia de floristerÃa, el primer paso es aprender más sobre el negocio de los arreglos florales, puesto que están cada vez más de moda.
Si decides emprender en este negocio, ten en cuenta que el elemento que marca la diferencia es la creatividad. Es decir, transformar diferentes variedades de flores en un producto ornamental, acompañado de un diseño original y, sobre todo, al gusto de cada cliente. Para ello debes dominar la combinación de colores, contrastes y texturas.
Métodos para el secado de flores
Una de las grandes ventajas de este negocio es que los ornamentos se pueden ajustar al bolsillo del comprador. Tu tarea es demostrar a tus consumidores que conoces a la perfección tu producto como para sugerirles distintas opciones que se ajusten a su gusto y presupuesto.
Existen diferentes métodos para el secado de flores:
-colgadas boca abajo,
-extendidas horizontalmente,
-con gel de sÃlice,
-con glicerina,
-prensándolas
-metiéndolas en el microondas
La forma más tÃpica y tradicional de secado es colgadas boca abajo, aunque no todas las flores se pueden exponer al secado de esta manera. Otro de los métodos más usados es extenderlas horizontalmente sobre una superficie plana horizontal (una estanterÃa o un armario, por ejemplo) sobre papel, cartón o madera. En este caso, las flores no deben estar en contacto unas con otras, sino individualizadas.